Los últimos resultados de la gestión del ministro de Economía de la Nación, Martín Guzmán, despertaron alarmas en el gobierno nacional y en el sector privado por igual, que comenzaron a reclamar respuestas más rápidas y efectivas ante variables que parecieran haberse descontrolado desde hace ya un buen tiempo.

Falto de un rumbo claro, el titular de la cartera de economía y finanzas fijó sus principales metas en el manejo de la deuda externa y la relación con los organismos multilaterales de crédito, dejando a un lado algunos de los principales factores de la economía interna, como la inflación y el empleo, que continuaron creciendo muy por encima de lo esperado.

Casi como un resultado inevitable, el ministerio de Economía se vio obligado a salir a buscar a un experto que asesore al gobierno en temas en los que, claramente, viene haciendo agua. Según fuentes de la cartera que dirige Guzmán, no será éste el último de los especialistas contratados.

Se trata de Luciano Mario Di Gresia, quien trabaja como director ejecutivo del Observatorio Fiscal Federal, un organismo privado que tiene como fin el análisis de indicadores fiscales en los tres niveles de gobierno, con el objetivo de un desarrollo federal efectivo.

La contratación de Di Gresia despertó críticas entre la oposición. “Resulta que un ministro es elegido para gestionar la economía de un país y, como no sabe cómo hacerlo, tiene que contratar a la vez a un experto para que le diga qué tiene que hacer. Es vergonzoso”, aseguró uno de los principales representantes del bloque de Juntos por el Cambio en la Cámara de Diputados de la Nación.

En efecto, el objeto de Di Gresia será, acorde con el pliego, el de brindar asesoramiento para la construcción de un modelo de equilibrio general computado para la economía argentina, y fue solicitado por la secretaría de Política Tributaria del ministerio de Economía de la Nación. Por ello, el experto cobrará unos 660 mil pesos por un lapso de tres meses, a un promedio de 220 mil pesos mensuales. (www.REALPOLITIK.com.ar)