Días atrás, en la transmisión del programa Intrusos, que conduce la actriz Flor de la V, estuvo como invitada la psicóloga Celia Antonini para hablar sobre la conducta y la configuración mental de los abusadores a partir del caso que explotó hace una semana sobre una organización de explotación sexual infantil y corrupción de menores, en la que el ex ganador y luego productor de Gran Hermano, Marcelo Corazza era integrante.

En una entrevista donde se evidenciaba la falta de perspectiva de género, y hasta se utilizó el término “enfermo” para referirse a los violadores reincidentes (esa vieja costumbre de justificar en la “enfermedad” al violador o al que golpea), Antonini se sentó como invitada para explicar que en el caso de los abusadores, violadores, “se hace una conformación diferente del cerebro que altera algunas áreas de éste, que tiene una diferencia anatómica y una diferencia funcional. Uno puede ver en un resonador magnético funcional una placa de un cerebro y se ve la placa de un pedófilo”.

Una de las entrevistadoras consultó si, además de “nacer así, pedófilo 8 (…) también hay gente que no nace así y que la perversión que a veces puede tener que ver con el sexo que está ligada puede relacionarse con niños sin necesariamente haber nacido así”.

¿ERROR … ?